Luces Rojas… y muchas sombras.

Robert de Niro interpreta a Silver

Robert de Niro interpreta a Silver

«Luces Rojas» es el tercer largometraje de Rodrigo Cortés, uno de los directores españoles actuales con mayor potencial.

Su primera película, «Concursante», fue recibida de forma muy dispar por la crítica. De ella se decía que era demasiado recargada, excesiva, pero también diferente, enérgica y original.

Con su segundo film, «Buried (Enterrrado)», Cortés asombró al mundo contando la historia de un hombre que fue enterrado vivo, y lo hizo sin ofrecer ni una sola imagen que no estuviera contenida dentro de ese minúsculo ataúd. Una obra de enorme talento y valentía.

Cuando se anunció su tercer proyecto, en el cual iba a estar involucrado además Robert de Niro, las expectativas y la expectación se hicieron enormes. Y ayer por fin tuve la oportunidad de verla. Resultado… decepción.

Parece esta una ópera prima, la obra de un principiante que filma un guión que funciona sobre el papel, pero no más allá de él. Al pasar todos esos monólogos al cine, el resultado, aunque no aburre, si se muestra artificial, recargado y poco ágil.

Se percibe que los diálogos y muchas de las situaciones no se gestan en la mente de los personajes, sino en alguien situado tras ellos, en este caso, un buen director que en esta ocasión ha cometido demasiados errores. El interés de Rodrigo Cortés porque se le vea tras las cámaras y sus caprichos han podido esta vez con el talento que atesora.

Los personajes no tienen ninguna profundidad, por lo que asistimos a una trama que se sigue con interés y facilidad, pero que no mueve ni conmueve al espectador. En este contexto, actores de la talla del ya mencionado Robert de Niro (el cual por otra parte lleva sin actuar de verdad ya muchos años), Sigourney Weaver o Cillian Murphy no pueden realizar una interpretación que vaya más allá de lo estrictamente correcto.

Fotograma de Luces Rojas

Fotograma de Luces Rojas

Del desenlace no hablaré para no desvelar absolutamente nada, pero Cortés, amigo, ¡qué coño estabas pensando!

Dicho todo esto, no podría terminar la crítica, no sería justo, sin señalar los aspectos más positivos del film. Es cierto que la idea de la que parte la película es atractiva, y en su desarrollo se alternan escenas muy interesantes que muestran los entresijos de este mundo tan desconocido que es el de la parapsicología.

La tensión está bien construida aunque a veces se recurra para ello a recursos demasiado efectistas, y el personaje de Silver consigue despertar expectación y temor al mismo tiempo.

Es por tanto, una película con ingredientes de sobra atractivos, pero cuya conjunción no se ha sabido hacer de la forma más adecuada. Esperamos y deseamos desde aquí, que en su próximo proyecto, Rodrigo Cortés no se preocupe tanto por jugar con el espectador como con contarle una historia coherente, porque desde luego talento le sobra para ello.

 

Calificación4.5
4.5

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Arturo G. Maiso

Viajero y cinéfilo. Director de Marketing en una plataforma de financiación participativa, CEO de AGM Comunicación Multimedia y director de El Cine en la Sombra.

2 comments

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  1. realgensin 1 abril, 2012 at 10:05 Responder

    Totalmente de acuerdo contigo, esta película es la mejor muestra de que Rodrigo Cortés es mejor director que guionista. Esto no es ningún agravio, cada uno vale para lo que vale.

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